3.Teniendo en cuenta las condiciones en los campamentos, no es una sorpresa que muchos combatientes del Ejército de Resistencia del Señor (LRA) permanezcan en el monte.
4.Según esos informes, durante el año anterior 87.000 personas se vieron obligadas a abandonar sus hogares y 68 aldeas fueron destruidas; de las 540.000 personas desplazadas dentro del país, 92.000 permanecen escondidas en la jungla.